«¡Cosas de la vida!» —una excelente frase de Carlson que describe la aparición de malos olores en el hogar. Las fuentes de estos pueden ser numerosas. No siempre provienen del exterior. A veces, nosotros mismos descuidamos la higiene o somos descuidados, y luego tapamos nuestras narices. El olfato se agudiza especialmente al regresar a casa después de estar fuera. Tras unos minutos, los receptores se adaptan. Así funciona nuestro cuerpo: el cerebro «bloquea» las sensaciones desagradables, y el hedor parece desaparecer. Pero, en realidad, es solo una ilusión. Aquí te contamos cómo eliminar los malos olores en casa.

**Causas de los malos olores en el hogar**
Un mal olor no surge de la nada; siempre tiene un origen. Estas son algunas posibles fuentes:

– **Alimentos en mal estado**: No todo se guarda en el refrigerador. Frutas y verduras suelen almacenarse en armarios de cocina. Revisa: quizá algo se haya echado a perder y deba desecharse.
– **Mascotas**: Fuente de múltiples aromas. Por muy limpias que sean, los gatos tienen sus hábitos y pueden orinar en zapatos, rincones o incluso la cama. Los perros, por su parte, adoran revolcarse en olores desagradables para los humanos, como excrementos, y luego traerlos a casa.
– **Fontanería vieja o desagües obstruidos**: Otro posible foco de mal olor.
– **Vecinos**: El hedor puede filtrarse por la ventilación. En ciudades grandes, el síndrome de acumulación compulsiva no es raro. Peor aún si un vecino solitario fallece. Mientras las autoridades resuelven, el olor persiste.
– **Olores del edificio**: Suelen provenir de buzones de basura atascados, especialmente en verano. Por eso, en edificios nuevos, suelen sellarlos.
– **Contaminación urbana**: Coches, centrales eléctricas y fábricas emiten gases y residuos de combustión.
– «Regalos» de constructores: Aunque parezca leyenda, algunos obreros descontentos han dejado huevos podridos o ratas en paredes o conductos de ventilación como venganza.

**Métodos efectivos para eliminar olores**

**Olor a orina**
Para ropa de cama o prendas, lava con detergente y suavizante. Añade un enjuague extra.

– Arthur Kochetarov, experto en limpieza, recomienda: «Espolvorea bicarbonato en muebles o pisos, luego limpia con un paño humedecido en peróxido de hidrógeno. Repite el proceso y aspira después de 12 horas. También ayuda una solución de vinagre (3-4 cucharadas por 200 ml), yodo, permanganato de potasio o lejía (tóxica para mascotas y puede dejar manchas)».

Sugiere evitar experimentos y optar por productos químicos modernos, seguros e hipoalergénicos. La opción más costosa es contratar limpieza profesional, que usa productos probados y deja el hogar impecable.

**Olores de mascotas**
Lo más efectivo son sprays especiales de tiendas de mascotas (600-1000 rublos por 500-750 ml). Funcionan con una sola aplicación y duran años. Se usan en zapatos, ropa o muebles, dejando actuar 15-20 minutos antes de enjuagar.

Alternativas caseras: soluciones de permanganato, vinagre (1:4), bicarbonato con peróxido, o carbón activado. Evita perfumes o ambientadores, que solo mezclan olores.

**Olor a quemado**
Uno de los más persistentes, común tras incendios. Los vapores penetran paredes y muebles.

– Ventila profundamente durante horas. Luego, limpia con lejía, bicarbonato o ácido cítrico. Mejor aún, usa productos específicos o absorbedores de olores (de alcance limitado, necesitarás varios).
– Arthur sugiere: «Coloca granos de café o vainilla. En tiendas de productos orientales venden inciensos que pueden neutralizarlo. Si persiste, considera pintar o cambiar el empapelado. Contrata limpieza profesional con enfoque en muebles».

**Olor a tabaco**
Ventila de inmediato. Los tonos fuertes desaparecerán, pero quedará un aroma ácido. Usa vapor a máxima potencia en muebles (con planchas de vapor). Lava cortinas, fundas y ropa. Limpia superficies con productos químicos o vinagre (2 cucharadas por agua), primero con paño húmedo, luego seco.

– Compra ambientadores antitabaco en perfumerías. El olor disminuirá, pero ventila diariamente durante una semana para eliminar residuos.